Entreálamos - Centro Residencial de Mayores - Atarfe, Granada

Elena C.

Agradecer la enorme labor de cada uno de los trabajadores. Ha sido poco tiempo el que hemos estado, pero ha sido suficiente para darnos cuenta de la profesionalidad de cada uno de ellos. Somos conscientes que no es su casa, pero habéis hecho que tanto mi abuelo como nosotras nos sintiéramos como en ella. Solo tenemos palabras de agradecimiento hacia el equipo. Ojalá sigáis por este camino tan bueno y bonito, siendo tan humanos con personas tan vulnerables.

Gracias
Familiares José Trujillos.

Jose N. M.

Después de ocho años en esta residencia nuestro familiar falleció hace pocos días.Queremos agradecer la maravillosa atención que recibió durante ese tiempo.La amabilidad y profesionalidad de todos los empleados en todos los niveles.Tanto con los residentes como con los familiares que los visitábamos.La situación en plena naturaleza es inmejorable lo que permite pasear y disfrutar de su entorno.Gracias por vuestro comportamiento y dedicación a nuestros mayores.

Conchita D.

Granada 18 de Diciembre de 2023

Apreciada amiga Belén y mejor directora:
Mi salida de la residencia fue un poco precipitada e incorrecta. Los hechos me sobrevivieron de golpe: llevaba consigo problemas de próstata y de una hernia inguinal, pero sobre todo mi falta absoluta de apetito y consiguiente debilidad con pérdida de masa muscular e hinchazón de las piernas me alarmaron sobremanera. La culpa fue mía por no hacerme una revisión, al menos una vez al año, y mi rechazo a los medicamentos mientras me encontrase bien. Exceso de confianza. Aparecieron lo que el párroco de mi pueblo llamaba “flaquezas de la vejez”.
Pero debe quedar claro que las atenciones y buen hacer de trabajadores y directivos fueron excelentes. Tengo que resaltar ante todo el calor humano que percibí en todos. Tú, Belén, en la dirección, la sonrisa de Angela, Vanesa y Zulema, la atención de Maribel que me proporcionaba los sudokus del periódico, el trato exquisito de Yolanda en el comedor, de Cristina en la fotografía, de Ana y Jorge en la rehabilitación y de Lidia en el cuidado de la habitación.
Aquí mi sobrina Conchita me atiende con la mayor entrega y cuidado, y espero recuperarme. Mis mejores recuerdos a los compañeros de mesa en las comidas - Hipólito, Miguel Ripoll, Juan y Mari Carmen. Recuerdos especiales a D. Francisco, a los componentes del consejo de mayores, y otros muchos que no cito por no ser pesado y prolijo. Es la mejor residencia no solo por su aspecto monumental e instalaciones junto con su entorno físico, sino por la calidad humana del personal directivo y trabajador.
Hasta siempre, mis mejores deseos y augurios por parte de Antonio Peramos.

Que la Navidad y el próximo año estén llenos de parabienes.

N.B. Te mando original, más entrañable, y copia más digital.

Carta de un residente agradecido por el trato y las atenciones hacia él.

Mario G. C.

Mi suegra ha estado ingresada en el centro y cada vez que venía a mi casa, se me partía el alma de verla como estaba, cada vez más decaída y siempre diciéndome que quería que la sacáramos de la sala tan lúgubre y penosa en la que estaba. Decía que estaba todo el día sentada, sin hacer nada, aparcada como un mueble escuchando gritos, insultos y hasta residentes desnudándose... y para colmo, dos meses con la cadera rota sin que los profesionales de allí se dieran cuenta de ello... Lamentable y muy penosa la situación vivida. Además, se pagaba más de 2000 euros por una habitación individual en la que ni siquiera estaba habilitada para entrara una camilla de una ambulancia. Es indignante....
Y por fuera y por dentro, con constantes obras infinitas sin finalizar, el aparcamiento sucio y con grietas por todo lados, techos medio derruídos (pasillo de entrada a la zona de fisioterapia).. Vamos, eso no son condiciones dignas....

Eduardo M. E.

Quisiera manifestar mi gratitud por los cuidados, trato y cariño recibidos por mi tía M.T. diariamente por parte de todo el personal del centro desde hace ya 5 años. Está feliz y se siente verdaderamente en su casa. Creo que las cosas buenas también hay que transmitirlas y compartirlas.

Criss C.

Bueno pues soy Cristina la nieta d Josefa Salado, la cual falleció el 13 d febrero solo quería agradecer la atención recibida por parte d todos desde dirección hasta cocineras, mi abuela entró en 2008 y estuvo con vosotros hasta el jueves y ese tiempo ganado es gracias a vosotros y si, digo ganado pq si no es por la calidad d vida q la habéis dado mi abuela se hubiera marchado ya hace muchos años..... Sois un equipo d 10. Ahhhh y nuevamente gracias por como me habéis tratado en estos duros momentos. Un besito muy fuerte y hasta la vista equipo

Susana G.

Mi padre hace 8 años que vive en la Residencia Entrealamos. Entró con un deterioro cognitivo leve por lo que, durante todos estos años, hemos ido viendo todas las fases de la evolución de su enfermedad junto a otras complicaciones derivadas de su edad.
Es un centro excelente con buenos profesionales. Aprender a aceptar la enfermedad de nuestro padre sin culparnos o culpar a otros fue duro, pero lo conseguimos.
Mis hermanos y yo no podemos estar más agradecidos al equipo de profesionales del centro por cómo han ido atendiendo a mi padre y a nosotros.
¡Seguid así, sois maravillosos!

Cris C.

Ingresamos a mi madre allí y es lo peor que hemos podido hacer.
Desde que entró ha sufrido numerosas caídas por falta de cuidado del personal, hasta tal punto que para ellos evadir responsabilidades la cambiaron de sitio y la encerraron en una habitación donde permanece sentada las 24 horas del día sin poder moverse.
Y lo peor de todo esto, es que en el mes de septiembre la tuvimos que llevar a urgencias ya que estuvo todo el fin de semana dormida sin despertar y vomitando. Y cuál es nuestra sorpresa, que según informe médico dio positivo en metanfetamina, morfina y benzodiazepinas….Comentar además que desde el mes de junio mi madre venía sufriendo dolores en la cadera y hasta el mes de septiembre no se preocuparon en pedirles una cita para una radiografía, ya que desde el servicio de fisioterapia nos decían que tenía una bursitis de cadera.
Pues bien, TENIA LA CADERA ROTA.
Desde el mes de abril, como os comento, ella estaba en una sala de asistidos, sentada todo el día, así que, ¿cómo es posible que se rompiera la cadera? Muy sencillo. Ella nos decía que la "tiraban a la cama como un saco".
Por otro lado, comentaros que mucho cuidado con las habitaciones. Hay habitaciones, como la de mi madre, en la que NI UNA CAMILLA DE AMBULANCIA podía entrar. La noche del 11 de septiembre, la trasladaron dormida desde la recepción de la residencia hasta su habitación en silla de ruedas (su habitación estaba en la segunda planta).
Y no deciros de cómo entró en el hospital. Con escaras bajo el pecho (no público la foto por no herir la sensibilidad) y en los codos.
Por otro lado, fuera de la residencia está todo hecho un desastre: en obras de forma permanente, el acceso con silla de ruedas sin finalizar, arquetas rotas, máquina y acopio de material de obra desde hace años, el techo del pasillo donde van los abuelos a la fisioterapia roto.... Vamos, un desastre.
No os recomendamos para nada el centro y ya os digo, está certificado como centro SIN ATADURAS y mi madre dió positivo en medicación no prescrita y no nos han dado explicación ninguna al respecto.